virus del demonio

 

Hablando de pensadores
que, con cientos de asesores,
estudiaron el planeta,
tenemos que mencionar
a Bill Gates, un gran profeta
que, al proponerse esa meta

y con su astucia de lince,
advirtió en el dosmilquince
que esto iba a suceder,
tratando de convencer
a los muchos mandatarios,
de emplear recursos varios
para evitar la tragedia
¡ de enfrentar una epidemia!
repitiendo:
“el tiempo apremia”
Pero no le hicieron caso;
le contestaron “si, claro…”
para así salir del paso…
Pero lo pagamos caro
y hoy no estamos preparados
ni en el cielo ni en la tierra,
para hacer frente al agobio,
que no es un misil de guerra
sino un virus del demonio.